El Castillo de Paso Alto de Santa Cruz de Tenerife es considerado como monumento por el Decreto 22 de Abril de 1949 por el Ministerio de Educación Nacional.
Este Castillo es de figura semicircular por la parte que mira al mar y el resto del edificio tiene una planta bastante irregular. Se penetraba en este poderoso edificio, el segundo en importancia después del Castillo de San Cristóbal, por una rampa que conducía a la puerta de comunicación con la plataforma o plaza de armas. Ésta se hallaba limpia de edificaciones anejas en la parte que daba al mar, sólo utilizada para el juego de la artillería, siendo maciza y terraplenada toda ella con pavimento de piedra. La espalda de esta formidable fortificación era de dos plantas: una superior, a la plaza de armas y otra inferior con distintas dependencias del castillo. La fachada exterior era de sillares en la base y de mampostería en el resto, estando coronado por un amplio pretil de piedra, en el que se abrían algunas almenas con garitas voladas. A lo largo del tiempo este castillo-fortaleza ha sido bastante reformado. Debido a las numerosas construcciones que se han venido sucediendo en su entorno el otrora imponente castillo-fortaleza de Paso Alto pasa totalmente desapercibido. Ya no es un castillo roquero porque se le ha ganado al mar mucho terreno y se encuentra rodeado por el club militar que lleva el mismo nombre que el castillo, Paso Alto.
DATOS HISTÓRICO-ARTÍSTICOS
Esta vieja fortaleza, según Pinto de la Rosa, se comenzó a construir en 1625, aunque otros autores apuntan otras fechas; así Rumeu de Armas habla que su construcción a manos de la corona tuvo que ser forzosamente entre los años 1640 y 1655 ya que este castillo tuvo una importante participación en la defensa de Santa Cruz ante el ataque de Robert Blake.
El castillo de Paso Alto resultaba muy necesario o más que el de la Caleta de Negros, además de proteger el frente del mar, cumplía con la útil misión de interceptar el paso de cualquier invasor que hubiese desembarcado en algún punto de la costa, más al norte, por ejemplo en la playa de San Andrés, lugar preferido y muy frecuentado por piratas y corsarios.
Durante algún tiempo, la situación administrativa del castillo fue bastante ambigua. El Conde de Puerto Llano había extraído de las arcas de la Hacienda Real los fondos necesarios a la fábrica, pero como era habitual no se había previsto el mantenimiento y guarnición. Sería el Cabildo quien tuvo que hacerse cargo de mantener el salario de los 18 soldados que tenía de guarnición, además del condestable y el castellano y los dos artilleros. Con el paso de los años esta importante fortaleza fue utilizada como cárcel y tuvo entre sus muros a famosos personajes como el singular y célebre Vizconde del Buen Paso.
Por último debemos hacer mención, para mayor gloria del castillo fortaleza de Paso Alto, que si la plaza militar de Santa Cruz permanece invicta se debe en gran medida a su labor a lo largo de toda su brillante historia, siendo el principal factor militar en la defensa de la ciudad en los famosos ataques de Blake, Jennings y Horacio Nelson.

